
La siega a mano, que durante siglos fué en Xares tarea habitual en las tardes de la segunda quincena del mes de Julio, perdió su sentido al ser sustituida la harina de centeno cosechado en el mismo pueblo, por harina de trigo tratada industrialmente, por los avances tecnológicos y por la despoblación sufrida por el pueblo. Sin embargo la técnica del segado a mano no ha quedado en el olvido y son muchos los vecinos que ahora habitan el pueblo, los que recuerdan con nostalgia aquella dura tarea, tan antigua como el mismo pueblo. El primer trabajo para poder cosechar el centeno, comenzaba en el mes de Marzo, cuando la tierra era arada, lo que se llamaba "ralbar", volviéndo a pasar el arado en el mes de Mayo "bilmar". En Septiembre se abonaba con estiercol y se sembraba el centeno, cuya cosecha se recogía en el mes de Julio del año siguiente, dejando el terreno en bruto para volver a ararlo de nuevo en Marzo, aunque también este mismo mes se sembraban patatas para volver a resembrar de centeno el mismo terreno en septiembre. También hay que decir que el centeno servía de sustento a las codornices, por lo que al haber mas terreno sembrado había gran abundancia de esta especie.
Dentro de la cultura en torno al centeno hay que reseñar que el Domingo de Ramos se llevaba uno de los ramos a la tierra para proteger la cosecha.La siega se iniciaba una vez acabada la temporada de siega y recogida de la hierba, por la mañana, al amanecer generalmente, las mujeres y mozos salían andando hacia las tierras, ubicadas a varios kilometros del pueblo, en el monte, para comenzar la tarea. Con la mano izquierda cogían una mañiza mientras con el hocín en la mano derecha la cortaban, dejándola en el suelo, con ayuda del hocín para evitar que la paja se rompa por el peso de las espigas, hasta reunir tres mañizas juntas, que denominaban gavilla y con tres gavillas juntas, hacían un mollo, del que sacaban con destreza varias pajas para atarlo.Mientras unos segadores van avanzando en el corte, en una línea mas o menos recta, repitiendo los mismos movimientos, otros van recogiendo las gavillas y atando los mollos, que van dejando repartidos en filas a lo largo del terreno.
Al dia siguiente, se recogían c
on el carro y eran transportados, con la espiga hacia el centro hasta la era, donde eran apilados en un montón llamado meda, también con el grano hacia dentro para protegerlo de la posible lluvia, después de haber cortado unas ramas, generalmente de roble, que servirán para aislarla del suelo en caso de lluvia. Los mollos se van colocando inclinados a modo de tejado para que en caso de que llueva, el agua rebale por la paja y la espiga permanezca seca, comenzando con una anchura que se va estrechando para acabar en pico y que puede llegar a tener una altura de cuatro o cinco metros. Cada vecino propietario de una parte de la era tenia su meda en una zona reservada para él, así en una era propiedad de varios vecinos cada uno tenía su espacio con su meda, dejando la parte central de la era libre para permitir mallar y trillar posteriormente.
A séga a a man, que durante séculos fué en Xares tarefa habitual nas tardes da segunda quincena do mes de Xullo, perdeu o seu sentido ao ser substituída a fariña de centeo colleitado no mesma vila, por fariña de trigo tratada industrialmente, polos avances tecnolóxicos e pola despoblación sufrida polo pobo. Sen embargo a técnica do segado a man non quedou no esquecemento e son moitos os veciños que agora habitan o pobo, os que lembran con nostalxia aquela dura tarefa, tan antigua como o mesma vila. O primeiro traballo para poder colleitar o centeo, comezaba no mes de Marzo, cando a terra era arada, o que se chamaba "ralbar", volviéndo a pasar o arado no mes de Maio "bilmar". En Setembro aboábase con estiercol e sementábase o centeo, cuxa colleita recollíase no mes de Xullo do ano seguinte, deixando o terreo en bruto para volver a aralo de novo en Marzo, aínda que tamén este mesmo mes se sementaban patacas para volver a resembrar de centeo o mesmo terreo en setembro. Tamén hai que dicir que o centeo servía de sustento ás codornices, polo que ao haber mais terreo sementado había gran abundancia desta especie.




Ao dia seguinte, recollíanse co carro e eran transportados, coa espiga para o centro ata a era, onde eran apilados nunha morea chamado meda, tamén co gran para dentro para protexelo da posible chuvia, despois de haber cortado unhas ramas, xeralmente de carballo, que servirán para illala do chan en caso de chuvia. Os mollos vanse colocando inclinados a modo de tellado para que en caso de que chova, o auga rebale pola palla e a espiga permaneza seca, comezando cun largo que se vai estreitando para acabar en pico e que pode chegar a ter unha altura de catro ou cinco metros. Cada veciño propietario dunha parte da era tenia seu meda nunha zona reservada para el, así nunha era propiedade de varios veciños cada un tiña o seu espazo con seu meda, deixando a parte central da era libre para permitir mallar e mallar posteriormente.


Au jour suivant, ils étaient repris avec la voiture et ils étaient transportés, avec l
'épi envers le centre jusqu'à elle il était, où ils étaient empilés dans un tas appelé meda, aussi avec le grain vers à l'intérieur pour le protéger de la possible pluie, après avoir coupé des branches, généralement de chêne, qu'ils serviront à l'isoler du sol en cas de pluie. Ce qui est mollos sont placés inclinés comme toit pour qu'au cas 0ù il pleut, l'eau rebale par la paille et l'épi reste sèche, en commençant avec une largeur qui se rétrécit pour finir en bout et qui peut arriver à avoir une hauteur de quatre ou cinq mètres. Chaque voisin propriétaire d'une partie de de elle était tenia son meda dans une zone réservée pour lui, ainsi dans une était propriété de plusieurs voisins chacun avait son espace avec son meda, en laissant la partie centrale de de elle il était libre pour permettre de mailler et de trillar postérieurement.



To the following day, they took shelter with the car and they were transported, with the ear towards the center until the era, where they were piled up in a
called pile meda, also with the grain towards inside protecting it of the possible rain, after to have cut branches, generally of oak, which they will serve to isolate it of the ground in case of rain. The mollos are placed inclined as a tile roof so that in case that it rains, the water rebale by the straw and the ear remains dry, beginning with a width that is narrowed to finish in tip and that can get to have a height of four or five meters. Each propietary neighbor of a part of the era tapeworm his meda in a zone reserved for him, thus in an era property of several neighbors each one had his space with his meda, letting the part central of the free era to allow to mallar and to beat later.
